La obesidad y el sobre peso son factores de riesgo para las enfermedades cardiovasculares y arritmias por eso su cardiólogo insisten en controlarlo.
La relación entre la obesidad y el corazón es compleja. Los efectos conocidos son la hipertensión, la dislipidemia y la diabetes, pero no son los únicos. También produce inflamación subclínica (inflamación crónica del cuerpo), disfunción endotelial (desbalance en los factores de relajación y contracción del endotelio), aumento del tono simpático, perfil lípido aterogénico, factores trombogenícos (que producen coágulo) y apnea obstructiva del sueño. Además es factor de riesgo para muerte súbita, fibrilación auricular y arritmias ventriculares.
La cintura
Para conocer el porcentaje de grasa en el cuerpo se mide la circunferencia abdominal. Según los cardiólogos el exceso de grasa acumulado en las vísceras está relacionado con la obesidad central (zona abdominal) y causa resistencia a la insulina. Para la Organización Mundial de la Salud las mujeres no deben superar los 88 centímetros de cintura y los hombres los 102.
Superando los límites
Los cardiólogos advierten que cuando la persona supera los centímetros de circunferencia abdominal incrementa sus riesgos y complicaciones como: aumento de triglicéridos, mayor riesgo de gota, diabetes, hipertensión y trombosis. “Un estilo de vida saludable puede hacer la diferencia, aunque también influye la genética”, explica Luis Alberto Gómez Macías, cardiólogo especialista en arritmias.
“Tener más de 103 centímetros de cintura -en el caso de las mujeres- aumenta 14 veces las posibilidades de diabetes tipo dos. Los hombres que superen los 112 tendrán siete veces más posibilidades”, asegura el cardiólogo especialista y continúa diciendo que los estudios en mujeres descubrieron que las que tenían elevado el perímetro abdominal tenían el doble de riesgo de morir de infarto. “Un perímetro mayor a 90 en las mujeres predispone a enfermedades cardíacas y cáncer”, afirma el cardiólogo especialista en arritmias.
Obesidad, arritmias y muerte súbita
Existe una relación entre la obesidad con las arritmias y la muerte súbita. En las conclusiones de un estudio publicado por cardiólogos en la revista Heart de la Sociedad Cardiovascular Británica los pacientes con una relación más alta de cintura-cadera, tenían más del doble de riesgo de muerte súbita. El grupo analizado eran mujeres de 54 años promedio a las que siguieron durante 13 años. “La muerte súbita se asocia a arritmias ventriculares”, dice Gómez Macías, cardiólogo especialista en arritmias. A veces se produce disfunción ventricular e insuficiencia cardíaca.
En el caso de las arritmias de fibrilación auricular, la obesidad puede causarla o favorecer su aparición. Los obesos tienen 50 por ciento más riesgo de estas arritmias y el riesgo se incrementa si aumenta el índice de masa corporal.